Poco a poco se acerca la Navidad y el cambio de año y estamos en un buen momento para planear una buena comida antes de decirle hola al 2015. Los restaurantes del centro de Madrid pueden ser una estupenda opción para quedar con los amigos o con los compañeros de trabajo y organizar una comida o cena a modo de despedida de 2014.
También se puede hacer algo más informal como irse de tapas y así poder probar un montón de delicias diferentes acompañados de una buena cerveza y la mejor compañía en un ambiente distendido y agradable, que en definitiva es lo que se suele buscar cuando se va de tapeo.
¿Por qué gusta tanto ir de tapas?
Es toda una tradición de gran arraigo en nuestro país, es una excusa perfecta para tomar y comer algo, pero sobre todo para socializar, para un reencuentro, para dar buenas noticias y para pasar un buen rato con nuestra gente, con aquellas personas que solemos ver todos los días o con aquellas con las que por diferentes razones no coincidimos normalmente.
En un buen grupo de amigos no faltará la interacción, las batallitas, las anécdotas, los planes de futuro y todas esas cosas que hacen que una pequeña escapada de tapas merezca realmente la pena y mucho más si la comida y la bebida son de calidad. Ese es el verdadero secreto del por qué nos gusta tanto ir de tapas.
Aunque la cerveza es una de las bebidas más consumidas en el ritual del tapeo también pueden elegirse otras como un buen vino o un refresco si no bebes nada de alcohol, la cosa es proponérselo y salir, disfrutar del momento en buena compañía y seguir haciendo de esta tradición algo tan grande que hasta los extranjeros que vienen a nuestro país quedan enamorados de ella. ¡Qué grande es irse de tapas!